Laredo
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LOCALIZACIÓN
Laredo es la capital del municipio con el mismo nombre, se encuentra en la comarca de la Costa Oriental, en Cantabria. Limita con la Bahía de Santoña (al norte) y los municipios de Liendo, Limpias y Colindres.
Este municipio está compuesto por la localidades de Laredo, La Arenosa, El Callejo, Las Cárcobas, Las Casillas, La Pesquera, Tarrueza y Villante.
Laredo tiene una población de 12.094 habitantes y se encuentra situado a 5 metros de altitud y a 47 km de Santander. Podemos disfrutar de la Puebla Vieja, el túnel de la Atalaya, el fuerte del Rastrillar y de edificios como la iglesia de Santa María de la Asunción, la Casa de las Cuatro Témporas, el Mercado de Abastos o la Casa de Cultura Doctor Velasco.
También podemos visitar la playa del Regatón, de la Salvé o de Aila o disfrutar de gran parte del Parque Natural de las Marismas de Santiño, Victoria y Joyel y de los montes que rodean la villa.
En Laredo se celebran la Batalla de Flores el último viernes del mes de Agosto, el Desembarco de Carlos V el tercer fin de semana de Septiembre, los Carnavales, la Semana Santa, Nuestra Señora del Carmen el día 16 de Julio, San Roque el 16 de Agosto, San Martín el 11 de Noviembre, San Isidro en el mes de Mayo, la Virgen de Santa Ana, San Lorenzo y La Bien Aparecida.
HISTORIA
Los primeros testimonios de vida en Laredo se sitúan en las fases tardías de la prehistoria. Se han encontrado, además, restos de estructuras de castros correspondientes al periodo protohistórico. En cuanto los asentamientos romanos o calzadas de paso, no hay certezas que demuestren su existencia en esta zona.
La primera referencia escrita a Laredo la encontramos en el año 968 en la obra Antigüedades de España donde se indica la existencia de este poblado de pescadores desde el año 757. También se menta a la villa 1068 en el Cartulario del monasterio de Santa María del Puerto de Santoña, cuando se entrega la iglesia de San Martín de Laredo y su cementerio al monasterio de Santoña.
En la Edad Media formó parte de Alfoz de Vecio, también conocido como Merindad de Vecio, junto con las localidades de Ampuero, Ceceña, Colindres, Limpias, Marrón, Seña, Udalla y los valles de Liendo, Sámano y Guriezo. Manteniendo su fuero no escrito hasta el siglo XIX.
Alfonso VIII, el 25 de enero de 1200 le concede el fuero. Laredo recibe el privilegio de ser villa real (es la tercera en Cantabria, antes lo recibieron Castro Urdiales y Santander) y se establecen sus límites jurisdiccionales que se extienden desde la desembocadura del Asón (oeste) hasta la del Agüera (este) y hasta Ampuero (hacia el interior de la provincia).
Laredo adquirió gran importancia gracias a esta concesión, una muestra es la asistencia de marineros de la villa en la conquista de Sevilla (suceso que aparece en el escudo municipal), otra es su incorporación en las Cantigas de Santa María de Alfonso X “El Sabio” mediado el siglo XIII.
La recepción del fuero hace que la villa obtenga privilegios económicos y que se extingan impuestos como el portazgo, todo esto favorece al crecimiento de la población en esta época. El crecimiento se extiende entre la iglesia de Santa María de la Asunción y el arroyo Bario (protegido por la muralla).
El fuero no fue la única causa del desarrollo de Laredo. Su pertenencia a la Hermandad de las Villas de la Marina de Castilla con Victoria también jugó un papel importante.
La aportación de la villa de barcos y hombres fue importante en la toma de Tarifa en el año 1339, en la victoria de Rochela, que favoreció el restablecimiento del comercio con Brujas. En el siglo XV continuó con esta aportación en acciones comerciales, bélicas o pesqueras como fue su presencia contra el reino de Granada.
En este mismo siglo se produce otro hecho llamativo en la localidad, la desaparición paulatina de la comunidad judía, bien por conversiones forzosas o por expulsiones.
Dentro de la vecindad de Laredo (en cuanto al poder administrativo y jurisdiccional) se encontraban: Ampuero, Hoz de Marrón, Liendo con Sopeña, Rocillo y Udalla según el manuscrito Becerro de Behetrías del año 1351. Limpias y Colindres se emanciparon en el 1400 y en el siglo XV también Liendo abandonó el ámbito de poder de Laredo.
En estos años entró a formar parte del Corregimiento de las Cuatro Villas de la Mar con San Vicente de la Barquera, Santander y Castro Urdiales. Eran años brillantes y poseían un fuerte respaldo de los reyes católicos pues era el puerto más cercano a Castilla y desde aquí iniciaban sus viajes en barco. Este fue el caso de Juana “La Loca” hija de Isabel La Católica, que partió en 1496 desde el puerto de Laredo para viajar a Flandes, donde se casó con Felipe “El Hermoso”. También utilizó este puerto Carlos V, que desembarcó en 1556 camino del Monasterio de Yuste.
El municipio de Laredo vio nacer gran número de marinos y armadores que tuvieron gran importancia en el descubrimiento y colonización de territorios, ejemplos son Gómez de Rascón, que viajó en la primera expedición a las Américas o Hernando de Alvarado y Juan Villota del Hoyo que realizaron viajes posteriores a Perú.
Varios capítulos hicieron que perdiera el primer puesto como enclave comercial y militar, las epidemias y otras catástrofes añadidas a las políticas del Consulado Marítimo de Burgos y el Consulado de Bilbao trastocaron el potencial de los puertos del puerto de Laredo y otros puerto de la comunidad cantabra.
En el año 1629, Laredo se convirtió en la capital del Corregimiento de las Cuatro Villas de la Costa del Mar, en la villa se fundaron las recaudaciones de impuestos reales. Una década más tarde, las tropas del arzobispo de Burdeos y el ministro de la marina del cardenal Richelieu embistieron y desvalijaron la localidad, esto junto con la perdida de importancia del puerto de Laredo agravaron su situación económica.
En el siglo XVII el concejo de Laredo lo componían el casco urbano de la Laredo, los barrios de Mellante, Pereda, Salviejo, Seña, Serna, Tarrueza y Valmejor. Su jurisdicción se dispersaba por las localidades de Ampuero, Cereceda, Hoz de Marrón, Oriñón y Udalla, aunque en 1728 se vio reducida por la emancipación de Ampuero y Seña.
En el año 1726, logró la ubicación del Regimiento de la Milicias, el corregidor obtenía el bastón de mando y se encargaba de representar al rey, pero este privilegio no privó a Santander de tener la supremacía. El bastón de Laredo comprendía los territorios situados entre Vizcaya y las Asturias de Oviedo.
Laredo comienza a ser ayuntamiento y cabeza de partido judicial en el año 1822. Tres años después de constituir la provincia de Santander, en el año 1836 la villa perdió el bastón y con él el corregimiento y las instituciones que en él pudieran encontrarse.
Tras una crisis de larga duración, en la segunda mitad del siglo XIX, se produce una recuperación gracias, sobre todo, a la instalación de fábricas de conservas y salazones y a un nuevo fenómeno “el turismo”(en 1876 se publicó la Guía de los Baños de Mar en Laredo).
En el año 1883 se urbanizan el casco medieval y se comienza la construcción del puerto pesquero. En cuanto a la primera urbanización de terrenos se lleva a cabo en la zona de El Canto sucediéndose posteriormente (en los años treinta) por los terrenos contiguos a las alamedas, al paseo de la playa y las viviendas unifamiliares, dando lugar al ensanche de Laredo. En la postguerra llega el fracaso de proyectos constructivos y la especulación prepara terrenos de Los Terreros (entre la puebla vieja y el puntal). Pero a comienzos de los años setenta llega el “boom” urbanístico.
En los años sesenta el turismo internacional, principalmente el francés, descubre este destino turístico(al que bautizan como “Capital de la Costa Esmeralda”) lo que hace que recibiera masivas visitas, sobre todo en periodo estival. En la actualidad el turismo sigue siendo una de las principales fuentes de ingresos de sus habitantes.
VÍDEO DE LAREDO