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La Cueva de las Brujas en Suances
Localización
La Cueva de las Brujas se sitúa en la localidad y municipio de Suances en Cantabria.
Historia
La cueva fue descubierta en el siglo XIX por Pérez del Molino pero científicamente quedo asentado el descubrimiento a nombre de C.A.E.A.P. a mediados de 1980.
Podemos llegar a esta cueva a desde el barrio de la Jerra a través de un camino carretero que conduce a una finca de propiedad privada en donde se encuentra la entrada
Físicamente la cueva tiene una entrada amplia, un sumidero fósil que nos lleva a un gran vestíbulo que va en descenso. A partir de este se abren varias galerías menores y de escasa profundidad. La más grande es la que se encuentra al lado izquierdo. La cueva presenta también abundantes formaciones.
En el interior de la cueva se encontraron restos de sigillata, cerámicas hechas a mano, conchas y huesos humanos en el camino de ingreso, en ese mismo lugar dos paneles de grabados fusiformes. En la superficie se hallo una pieza de sílex.
En el interior de la cueva podemos apreciar diversos gramados en estilo “macarroni” no figurativos. Este estilo resulta de pasar las yemas de los dedos por la arcilla fresca sobre las paredes y techos de la cueva. Paneles de este estilo, macarroni, se han hallado también en el área circúndate tales como la Cueva de Altamira, Clotilde y Cudón. Según los expertos ubican esta manifestación artística en una fase antigua del Paleolítico Superior, entre el Auriñaciense y el Solutrense.
En los alrededores de la cueva también se encontraron algunas monedas, tejas y restos de mosaico y una variedad de materiales cerámicos de la época romana.
En torno a esta cueva se cuenta una leyenda que dice así:
“Se dice, se cuenta, que de una cueva cerca de Suances, llamada Cueva de las Brujas, partió durante siglos una caravana de muerte y misterio, una tropa de hechiceras y magas que volaban los cielos de nuestra tierruca maldiciendo y portando saberes ancestrales usados para el mal y la adoración del maligno. La sabiduría popular ha mantenido hasta hoy la memoria de una ruta prohibida y mágica que tenía como inicio Ongayo y como meta Cernégula (Burgos)…. tal y como dice una conocida copla popular: “De la cueva de Ongayo salió una bruja con la greña caída y otra brujuca. Al llegar a Cernégula ¡válgame el Cielo! Un diablo cornudo bailó con ellas. Por el Redentor, por Santa María, con el rabo ardiendo/ ¡cómo bailarían!”
La Cueva de las Brujas fue declarada Bien de Interés Cultural en 1997.
Servicios
Si bien la Cueva de las Brujas se encuentra cerrada al público se puede visitar presentando una solicitud a la Consejería de Cultura del Gobierno de Cantabria.
